3. Recomendaciones y lecturas
Tomado de: http://www.anexom.es/tecnologia/adsl/las-
recomendaciones-de-jazztel-del-28-de-febrero-al-6-de-marzo/
Como habíamos dicho antes, la Biblia tiene dos divisiones principales: Antiguo y Nuevo Testamento. ¿De qué dependen estas dos divisiones? Respuesta: de la primera venida de Cristo a la Tierra. El Antiguo Testamento es una sombra del Nuevo Testamento, es decir, nos da un conocimiento inicial que después se amplía y se aclara en el Nuevo Testamento.
Todo lo que sucede y está contenido en el Antiguo Testamento se explica y cobra significado en el Nuevo Testamento. A modo de ejemplo: el Antiguo Testamento es un edificio en obra negra, el Nuevo Testamento es el mismo edificio pero con todos sus acabados, ya listo, ya terminado.
Debemos hacernos una pregunta: ¿qué tan importante fue la venida de Cristo a la Tierra que provocó que a Su Palabra se le diera una división principal en base a ello? Quizás más adelante lo podamos entender, comprender y valorar así como todo lo que Cristo hizo por nosotros. ¡Gloria a Dios! ¡Bendito sea Dios!
Entonces, teniendo en cuenta que nosotros hemos nacido después de que Cristo vino a este planeta y que la presente época de la historia es cuando está la Iglesia de Cristo, debemos leer el Nuevo Testamento, ya que en él está contenidas todas las instrucciones para la Iglesia Cristiana de hoy y nosotros formamos parte de esa Iglesia. El nuevo Testamento es tu guía para tu vida cristiana.[1]
La recomendación es comenzar leyendo los cuatro Evangelios: Mateo, Marcos, Lucas y Juan, los cuales hablan sobre la vida de Cristo. Sin embargo, te recomiendo fuertemente comenzar leyendo el Evangelio de Juan. Ningún escrito que hable sobre la vida de Jesús supera al Evangelio de Juan [1], además que nos muestra la faceta humana de Jesús de una manera más profunda y cercana a nosotros.
Luego puedes seguir leyendo el libro de los Hechos de los apóstoles, el cual nos brinda una imagen perfecta de lo que debe ser la Iglesia cristiana e igualmente nos narra la historia de la expansión de la Iglesia desde Jerusalén hacia otras ciudades y países.
Después debes leer el resto del Nuevo Testamento, el cual contiene cartas generales a la Iglesia y el Apocalipsis. En estas cartas se encuentran consignadas todas las enseñanzas doctrinales e instrucciones prácticas para la Iglesia cristiana. El Apocalipsis, por su parte, nos revela el plan final de Dios para la humanidad y para la Iglesia. Es un libro de esperanza, no de terror.
Para finalizar el plan de lectura, se te aconseja leer el Antiguo Testamento y tomar todas las enseñanzas posibles que de él puedes sacar. Son enseñanzas prácticas, excelentes y muy profundas.
Hay siempre unas recomendaciones para antes, durante y después de leer la Palabra de Dios, las cuales veremos a continuación:
a. Antes
Tomado de: https://ministeriointernacionalepdd.wordpress.com/tag/dios-habla/
"Recuerden lo que dice:
«Cuando oigan hoy su voz,
no endurezcan el corazón
como lo hicieron los israelitas
cuando se rebelaron»."
Hebreos 3:15 NTV
2. Pídele al Espíritu Santo que te guíe al leer la Biblia.[3]
"Pero cuando venga el Espíritu de la verdad, él los guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propia cuenta sino que dirá sólo lo que oiga y les anunciará las cosas por venir."
Juan 16:13 NBD
3. Ten, en lo posible, un lugar para estar a solas y sin
interrupciones. [4]
"En esos días Jesús se fue al monte a orar, y pasó toda la noche en oración a Dios."
Lucas 6:12 LNBH
4. Ten una Biblia propia y subraya los versos claves para tu vida.[5]
"He guardado tus palabras en mi corazón
para no pecar contra ti."
para no pecar contra ti."
Salmo 119:11 DHH
b. Durante
Vamos a mirar la sugerencia bíblica de lo que se debe hacer durante la lectura de la Palabra de Dios. En este caso vamos al libro del profeta Nehemías:
"Y los levitas Jesúa, Bani, Serebías, Jamín, Acub, Sabetai, Hodías, Maasías, Kelita, Azarías, Jozabed, Hanán y Pelaía, hacían entender al pueblo la ley; y el pueblo estaba atento en su lugar.
Y leían en el libro de la ley de Dios claramente, y ponían el sentido, de modo que entendiesen la lectura."
Nehemías 8:7-8 RVR
Tomado de: http://www.evangelizafuerte.com.mx/2013/10/del-libro-del-profeta-
nehemias-81-4-5-6-8-12-jueves-3-de-octubre-de-2013/
En otra versión podemos encontrar el mismo pasaje así:
"Los levitas Josué, Baní, Serebías, Jamín, Acub, Sabtai, Hodías, Maaseías, Quelitá, Azarías, Jozabad, Hanán y Pelaías explicaban la ley al pueblo. Mientras la gente permanecía en su sitio, ellos leían en voz alta el libro de la ley de Dios, y lo traducían para que se entendiera claramente la lectura."
Nehemías 8:7-8 DHH
De este verso podemos aprender las siguientes lecciones para cuando leamos la Biblia:
1. Estar atento a la lectura, es decir, estar enfocado en el contenido que se está leyendo, estar concentrado.[6]
2. Leer en voz alta, con claridad e interpretar de modo que se comprenda la lectura. Leer en voz alta te ayuda a entender y captar el sentido de lo que estás
leyendo.[7]
c. Después
Lo verdaderamente importante después de haber leído la Biblia, lo detalla el siguiente verso:
"No se contenten sólo con escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica."
Hay que llevar a la práctica la Palabra de Dios. De lo contrario, no estamos cumpliendo con el objetivo que Dios desea, es decir, que obedezcamos Su palabra. Si leemos la Palabra de Dios, es para obedecerla, de lo contrario, como dice Santiago, nos engañamos. El objetivo central de leer la Biblia es conocer a Dios, Su voluntad y que lo obedezcamos.
1. Estar atento a la lectura, es decir, estar enfocado en el contenido que se está leyendo, estar concentrado.[6]
2. Leer en voz alta, con claridad e interpretar de modo que se comprenda la lectura. Leer en voz alta te ayuda a entender y captar el sentido de lo que estás
leyendo.[7]
c. Después
Lo verdaderamente importante después de haber leído la Biblia, lo detalla el siguiente verso:
"No se contenten sólo con escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica."
Santiago 1:22 NVI
Hay que llevar a la práctica la Palabra de Dios. De lo contrario, no estamos cumpliendo con el objetivo que Dios desea, es decir, que obedezcamos Su palabra. Si leemos la Palabra de Dios, es para obedecerla, de lo contrario, como dice Santiago, nos engañamos. El objetivo central de leer la Biblia es conocer a Dios, Su voluntad y que lo obedezcamos.
Tomado de: http://josenicolasmadrid.blogspot.com/2012/10/evangelio-del-dia
-escuchar-y-practicar.html/
4. Cómo buscar en la Biblia
Para hacer más fácil la búsqueda de contenidos en la Biblia, ella tiene una "nomenclatura" u organización general, establecida de la siguiente manera:
- División principal: Antiguo Testamento y Nuevo Testamento
- Subdivisiones internas del Antiguo y Nuevo Testamento.
- Libros
- Capítulos
- Versos o versículos
Entonces, podemos observar que un determinado párrafo en la Biblia va a estar ubicado en el Antiguo o Nuevo Testamento(según sea el caso), va a estar inmerso dentro de un libro y se va a localizar por medio de un capítulo y de un respectivo versículo.
Por ejemplo, miremos la siguiente cita:
"Cristo me da fuerzas para enfrentarme a toda clase de situaciones."
¿Qué pasa, entonces, aquí? Pues que esta cita tiene las siguientes características:
El anterior análisis fue muy específico, pero, para hacerlo más fácil, podemos mirar también así:
- Libro = Filipenses
- Capítulo = Cuatro (4)
- Verso = Trece (13)
De ese modo, ya sabemos el libro de la cita, su capítulo y su respectivo versículo. Es el modo en que generalmente se busca una cita. Claro está que es necesario que sepamos en qué parte de la Biblia esta el libro, o sea, si en el Nuevo Testamento o en el Antiguo Testamento, pues así se facilitará su búsqueda.
Este es otro ejemplo:
A continuación se presenta un listado de los libros de la Biblia según su ubicación en cualquiera de los dos Testamentos y según la subdivisión interna, acompañado de los respectivas abreviaturas de cada libro:
Para buscar en la Biblia, más exactamente buscar una cita bíblica, se tiene el sistema de las divisiones, subdivisiones, libros, capítulos y versículos, los cuales vimos antes. Pero, ¿cómo hacemos para ubicar una cita en una biblia impresa o digital? Los siguientes vídeos nos ayudarán a conocer la forma de buscar una cita bíblica ya sea en medio impreso o en medio digital según el sistema de organización que hemos aprendido:
Cómo leer la Biblia - 01 (Capítulos y versículos)
[1] Lindsay, G. (2002). Cómo vivir una vida cristiana. Christ for the Nations,Inc. Pág. 5.
Para hacer más fácil la búsqueda de contenidos en la Biblia, ella tiene una "nomenclatura" u organización general, establecida de la siguiente manera:
- División principal: Antiguo Testamento y Nuevo Testamento
- Subdivisiones internas del Antiguo y Nuevo Testamento.
- Libros
- Capítulos
- Versos o versículos
Entonces, podemos observar que un determinado párrafo en la Biblia va a estar ubicado en el Antiguo o Nuevo Testamento(según sea el caso), va a estar inmerso dentro de un libro y se va a localizar por medio de un capítulo y de un respectivo versículo.
Por ejemplo, miremos la siguiente cita:
"Cristo me da fuerzas para enfrentarme a toda clase de situaciones."
Filipenses 4:13 TLA
¿Qué pasa, entonces, aquí? Pues que esta cita tiene las siguientes características:
- Filipenses, o también llamado "Carta a los Filipenses", es el libro en el cual está
inmersa la cita.
- El capítulo donde está ubicada la cita es el número cuatro (4).
- El verso que identifica esta cita es el trece (13).
- Está ubicada en el Nuevo Testamento, pues Filipenses es un libro del Nuevo
Testamento.
- La subdivisión a la que pertenece Filipenses es "Epístolas Paulinas", por lo tanto, la cita es de una carta o epístola paulina.
Así pues, hallamos que la Biblia se divide en Antiguo Testamento y Nuevo Testamento, estos dos se subdividen en conjuntos de libros de características comunes (lo cual se vio en la lección "La Biblia - Parte 1), y que dichas subdivisiones se componen de libros que comparten características similares. Igualmente, los libros se componen de capítulos y los capítulos de versos o versículos.
Así pues, hallamos que la Biblia se divide en Antiguo Testamento y Nuevo Testamento, estos dos se subdividen en conjuntos de libros de características comunes (lo cual se vio en la lección "La Biblia - Parte 1), y que dichas subdivisiones se componen de libros que comparten características similares. Igualmente, los libros se componen de capítulos y los capítulos de versos o versículos.
El anterior análisis fue muy específico, pero, para hacerlo más fácil, podemos mirar también así:
- Libro = Filipenses
- Capítulo = Cuatro (4)
- Verso = Trece (13)
De ese modo, ya sabemos el libro de la cita, su capítulo y su respectivo versículo. Es el modo en que generalmente se busca una cita. Claro está que es necesario que sepamos en qué parte de la Biblia esta el libro, o sea, si en el Nuevo Testamento o en el Antiguo Testamento, pues así se facilitará su búsqueda.
Este es otro ejemplo:
Tomado de:http://www.renacer.org.ar/index.php
/home-page-5/punto-de-partida/2-la-biblia
/home-page-5/punto-de-partida/2-la-biblia
A continuación se presenta un listado de los libros de la Biblia según su ubicación en cualquiera de los dos Testamentos y según la subdivisión interna, acompañado de los respectivas abreviaturas de cada libro:
Para buscar en la Biblia, más exactamente buscar una cita bíblica, se tiene el sistema de las divisiones, subdivisiones, libros, capítulos y versículos, los cuales vimos antes. Pero, ¿cómo hacemos para ubicar una cita en una biblia impresa o digital? Los siguientes vídeos nos ayudarán a conocer la forma de buscar una cita bíblica ya sea en medio impreso o en medio digital según el sistema de organización que hemos aprendido:
Cómo leer la Biblia - 01 (Capítulos y versículos)
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=gh2zVFm1uac
Cómo encontrar versículos en la Biblia
Fuente: https://www.youtube.com/watch?v=edFN4B-sBeE
Teniendo en cuenta las instrucciones dadas en los vídeos anteriores, ya podemos buscar citas bíblicas y ubicarlas con facilidad.
Si tienes alguna duda o pregunta, puedes dejarla consignada en el espacio inferior de comentarios.
Más adelante, en otro apartado, continuaremos con más lecciones. Dios los bendiga.
[1] Lindsay, G. (2002). Cómo vivir una vida cristiana. Christ for the Nations,Inc. Pág. 5.
[2] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 35
[3] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 35
[4] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 35
[5] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 35
[6] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 34
[7] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 34
[3] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 35
[4] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 35
[5] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 35
[6] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 34
[7] Casa Sobre la Roca. (2000). Vida Nueva. Editorial Buena Semilla. Pág 34